domingo, 16 de mayo de 2010

Entrenos con el club

Este finde he tenido la oportunidad de nadar y montar con mis compis del Tripi, lo cual me permite contrastar mi nivel de forma de una forma menos traumática que en una competición, además de sentirme vinculado al club y conocer a sus gentes.

He notado mi mejoría en el agua. Para hacer piruetas y sincronizada. Por fin están fructificando las eternas sesiones de socorrismo, patadas y demás zarandajas con las que nos obsequia mi profe de natación cada día. Porque mis compañeros del club de la calle lenta me daban sopas con honda. Ni cuento la rápida. No es que el primer largo me salga mal, es que es "el largo", porque luego me vengo abajo. Me faltan muchas series, todo lo contrario de lo que hacemos ahora en clase. Espero que tanta técnica sea una inversión a futuro.

Hoy montamos unos 70 y algún kilómetros, un día fantástico de temperatura y luz y regular de viento. La novedad es que no he sido el último en las cuestas, como venía siendo mi costumbre. Ha habido algún tramo de rodaje bueno, como cuando he tenido YO que saltar del pelotón para enganchar a tres ciclistas que nos adelantaban para diversión de mis compañeros, que gracioso el nuevo.

"Esos son ciclistas, si aprietan en cualquier cuesta te dejan tirado". "Y yo corredor, y cuando salgo con la ropa del club, o no me adelanta nadie o me pega el mazo. Ya les quería ver nadando a esos". Y gracias a mi lema, he podido rodar con los "enemigos" unos 8 kilómetros a casi 34 por hora con viento de cara, hasta que nos hemos despedido y me he reintegrado a la disciplina del equipo, en mi lugar de cola. Nueva marca también hoy, en velocidad máxima cuesta abajo, 72,3 kms/h, sin pedalear.

Y echando cuentas para un triatlón olímpico (1,5 kms nadar + 40 kms bici + 10 kms correr), si mis compañeros nadan a 1:25 los 100 metros y sacan medias de 33 kms/h sin inmutarse, en el hipotético caso de que yo sacase un tiempazo de 40 minutos en mi especialidad, el diez mil de postre, para igualarlos tendrían que correr a... 5:30 minutos el kilómetro... ni empujando una silla de ruedas. Vamos, que me van a meter un cuarto de hora, sin tener en cuenta que tengo posibilidades de no encontrar la bicicleta a la primera, no saberme quitar el neopreno del tirón...

Esto no me produce tristeza sino risa, porque estoy muy mentalizado de que mis primeros triatlones van a ser para adaptarme y disfrutar a este deporte. Y si me dejan, a pegar algún susto a alguno...

1 comentario:

  1. ¡Ole!
    ...que ya lo tienes todo enfilado para terminar un triatlón olímpico...
    Ni te vas a despeinar
    ;-)

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